Aprende qué es, cómo se hace, qué desechos sirven para hacer el compost y cómo usarlo para enriquecer la tierra de tu jardín.
¡No tires esos restos de comida, los puedes compostar! Según la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos, los desechos de comida representan casi el 22% de todos los residuos que van a los vertederos, más que cualquier otro material en nuestra basura diaria.
Además de mantener los residuos de alimentos fuera de los vertederos, el compostaje tiene también otros beneficios, convirtiendo los restos de alimentos y los recortes de plantas en un abono rico en nutrientes.
Algunos estados y municipios se han preparado para promulgar prohibiciones de desperdicio de alimentos en los vertederos y ofrecen sólidos programas sociales que hacen que sea realmente fácil para las personas comenzar a separar los restos orgánicos de la demás basura.
Pero incluso si no tienes un programa ecológico disponible en tu área, puedes hacer compost en casa. Hacerlo en tu patio trasero no es tan complicado o desordenado como podrías pensar. Combinando unos pocos y sencillos ingredientes en las proporciones adecuadas, puedes estar en camino de reducir el desperdicio de alimentos y crear un fertilizante de suelos que beneficie tanto a tu jardín como al planeta.
¿Qué se necesita para hacer un compost?
El compost es materia orgánica descompuesta y requiere cinco ingredientes básicos:
- Materiales ricos en carbono (materia café), como hojas, paja, corteza, papel, granos de café, tallos de maíz, virutas de madera o aserrín.
- Materiales ricos en nitrógeno (materia verde), como recortes de pasto, restos vegetales o poda de arbustos.
- Agua
- Oxígeno
- Microorganismos, como insectos detritívoros, lombrices, bacterias, mohos y hongos.
Los microorganismos, con la cantidad adecuada de agua y oxígeno, descomponen las fuentes de carbono y nitrógeno para crear un producto final que ayuda a las plantas a retener el agua y nutrientes, y mejora el drenaje y la estructura del suelo. Además, convertir los residuos de jardín y de comida en fertilizantes puede reducir enormemente la acumulación en los vertederos.
Tipos de compostaje
Hay tres tipos de compostaje.
Aeróbico
El método aeróbico se basa en la mezcla de oxígeno en los materiales compostables para elevar la temperatura y ayudar a descomponer el material. Esto requiere girar (o mezclar) los materiales de vez en cuando para exponerlos al oxígeno.
Anaeróbico
El método anaeróbico es la forma más fácil de hacer abono, pero también es muy apestoso y lento. Implica apilar los verdes y cafés y dejar que la naturaleza maneje el proceso de descomposición sin ayuda.
Lombricompostaje
Para hacer lombricompost se utiliza un compostador de gusanos para el proceso de descomposición. Eso significa que, en lugar de dejar que los materiales orgánicos se descompongan naturalmente, los gusanos se lo comen para producir un producto terminado más rico.
Cómo compostar
Para simplificar, esta guía es para el método aeróbico.
Paso 1
Agregue restos de cocina y materia orgánica a su contenedor según sea necesario, con una buena mezcla de materia verde y café. Aunque las lombrices y microorganismos como los colémbolos están disponibles para la compra, probablemente no los necesitará porque casi siempre están presentes de forma natural en la tierra.
Paso 2
Mantenga la pila húmeda pero no demasiado húmeda, ya que esto dificultará la descomposición. Agregue aserrín para secarlo o agua para humedecerlo según sea necesario.
Paso 3
Gire la pila con un rastrillo o una horquilla regularmente. Girar el abono ayuda a promover el flujo de oxígeno y libera el calor que se acumula durante la descomposición.
¿Qué se puede compostar?
Eventualmente, cualquier materia orgánica se descompondrá, pero para el compostaje en el patio trasero, debe usar elementos que se descompongan relativamente rápido y que no atraigan a los animales.
- Restos de vegetales y frutas
- Café molido y filtros
- Cáscaras de huevo
- Té y bolsitas de té
- Recortes de césped
- Hojas
- Periódico triturado
- Cartones sucios, como cajas de pizza, desgarrados en pedazos pequeños
Estos artículos sólo pueden ser procesados en instalaciones comerciales (no en su patio trasero):
- Todos los restos de comida, incluyendo productos animales y huesos.
- Restos de alimentos con grasa.
¿Qué no se puede compostar?
Si bien el compostaje es una excelente manera de reducir el desperdicio, algunos artículos harán más daño que bien. Evite colocar estos materiales en su compostera:
- Productos de origen animal como lácteos, huesos y carne, que pueden atraer plagas (pueden ser compostados en lugares especializados).
- Alimentos grasos como mayonesa, mantequilla de maní, aderezos para ensaladas o aceites vegetales, que son difíciles de descomponer (también se pueden compostar en lugares especializados).
- Residuos de perros, gatos y humanos, que pueden contener patógenos nocivos.
- Desechos de jardín tratados con pesticidas, cuyos productos químicos no se descomponen durante el proceso de compostación.
- Flores cultivadas comercialmente, que a menudo contienen colorantes y productos químicos.
- Las malas hierbas y sus raíces, pueden crecer en la pila y extenderse donde sea que coloque el compost.
- Material vegetal enfermo, que puede propagar la enfermedad a otras plantas.
- Productos bioplásticos etiquetados como biodegradables.
¿Cuánto tiempo tarda en degradarse la composta?
El compost está listo cuando la pila ya no emite calor, es de color oscuro y se desmorona fácilmente. Como mínimo, tomará varios meses para formarse. El uso de piezas más pequeñas de fuentes de carbono y nitrógeno, asegurando una humedad constante y volteando la pila regularmente puede ayudar a acelerar el proceso.
Evite usar compost sin terminar en su jardín, ya que en realidad puede ser tóxico para las plantas.
¿Cómo se aplica el compost al suelo?
- Mezcle el compost en la parte superior con la tierra de su jardín.
- Úselo como mantillo alrededor de árboles y arbustos.
- Úsalo como cubierta para el césped.
- Remplace la tierra se sus mesetas por compost.
¿Necesitas usar un contenedor de compost?
El verano significa muchas frutas y verduras frescas y eso significa muchos restos de cocina para manejar. No los envíes al triturador de basura ni los tires. En cambio, recíclalo en tu jardín.
El compostaje con contenedores o en pilas al aire libre es una gran manera de manejar estos desechos. Pero si estos métodos no son para ti, prueba el compostaje de zanja.
Corta los restos de la cocina, sin carne, grasa o queso, en trozos más pequeños siempre que sea posible para acelerar la descomposición. Luego enterrarlos en un agujero en un espacio desocupado en el jardín. Realmente es así de fácil.
Haz zanjas en lugares en donde siembras normalmente en tu jardín. Entierra los residuos vegetales en zanjas durante todo el verano. La siguiente temporada siembra en ese mismo lugar, las partes modificadas úsalas como área de plantación. De esa manera estás continuamente reciclando restos de cocina, mejorando el suelo y rotando tus cultivos.